El tatuaje está de moda en la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG), y es un elemento de identidad de las diferentes clases sociales, afirmó José de Jesús Loza Sánchez, quien realiza la investigación “Las prácticas socioculturales de las artes visuales como proceso de la reconfiguración de la identidad de la clase media”, con apoyo del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
El incremento en la demanda es evidente en el crecimiento de la oferta. Cada vez son más estudios o establecimientos los que se dedican a hacer tatuajes.
El estudiante del doctorado interinstitucional en Arte y Cultura, del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD) de la UdeG, aseguró que en Jalisco, hace cuatro años, había 54 establecimientos o locales para tatuar, y ahora hay alrededor de 150 legalmente reglamentados ante Padrón y Licencia sólo en la ZMG.
La moda del tatuaje en la ZMG es un reflejo de lo que pasa en el país y en América Latina. En Latinoamérica se calcula que se tatúan en promedio 3 mil personas al día. En el país, 2 mil 500 al mes y se calcula que hay 14 millones de personas tatuadas. El 60 por ciento son mujeres, destacó Loza.
En el contexto nacional, Jalisco se está convirtiendo en un referente en el mundo del tatuaje. “En la Zona Metropolitana se encuentran muchos de los principales tatuadores nacionales, como “El Güello” y El Sammy”, detalla.
Al respecto, el tatuador David Sánchez Rico “El Barra”, aseguró: “Guadalajara es una de las mejores plazas del país en el tatuaje. En esta ciudad hay muy buenos artistas. Muchos están empezando a destacar en las expos del tatuaje. Hay quienes aprendieron aquí y ya trabajan en otras ciudades como Puerto Vallarta o Ciudad del Carmen, Campeche. La Perla Tapatía es una de las mecas del tatuaje. Mucha gente interesada en aprender viene a esta ciudad. Yo he tenido aprendices de otras partes del país, como León, Guanajuato”.
Loza Sánchez explicó que en el estrato bajo hay sectores que usan el tatuaje para identificarse con una pandilla, y es una prueba de virilidad y valentía para quien va a defender su territorio; otros, se tatúan por motivos religiosos, figuras muy emblemáticas para ellos son la Virgen de Guadalupe y Jesucristo. En cuanto a las mujeres de ese estrato social, suelen tatuarse por moda.
En las personas de clase media se incrementa el uso del tatuaje en lugares no visibles como espalda, en piernas y antebrazos para estar a la moda. Suelen tatuarse profesionistas, principalmente, los abogados y médicos, aunque también hay odontólogos y contadores. En las clases altas se suelen usar para “estar en onda” y como símbolo sensual y erótico.
En cuanto a los tatuadores se están convirtiendo en una especie de nuevas estrellas de rock que gozan de popularidad, sobre todo aquellos que tienen conocimientos o estudios en artes plásticas, dominan diferentes técnicas artísticas y las experimentan haciendo tatuajes. A quienes actualmente se forjan en el oficio mismo, sin estudios de artes plásticas, les está costando un poco más de trabajo. “Los profesionales del arte están teniendo más éxito en el mercado”, expresó Loza Sánchez.
“Hay chavos que ahorran durante mucho tiempo, y que pueden hacer cita hasta con un año de antelación para presumir que fueron con determinado tatuador, reconocido en las redes sociales. Incluso, tengo registrado un caso de una joven que se fue a tatuar a Barcelona y el tatuaje le costó alrededor de 18 mil pesos”, afirmó el doctor Rogelio Marcial Vázquez, académico del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH).
ATENTAM E N T E
"Piensa y Trabaja"
Guadalajara, Jal., 2 de julio 2017
Texto: Martha Eva Loera
Fotografía: Abraham Aréchiga